Micros naranjas con chicos que: saltaban, gritaban y cantaban por su movimiento político avanzaban por la avenida Libertador mano a provincia de Buenos Aires. Llevaban banderas y remeras que les permiten fortalecer la identidad del grupo. También había parejas que hablaban de cuestiones varias de la vida, niños que jugaban en la vereda, vecinos que se asomaban por los balcones sorprendidos por los ruidos que surgían en la calle.
Una tarde que no es una más de un día feriado, sino que tiene un plus distinto. Muto mucho en estos últimos años la manera de recordar: caminatas de pocos en Plaza de Mayo acompañando a las Madres, Abuelas e Hijos, llenos totales y acompañamiento masivo, entregas de predios, actos en varios puntos del país, y en estos últimos tiempos, se ha instalado como paradigma: llenar de vida a un día que tanto se lo relaciona con la muerte.
Hace 38 años comenzaba en la Argentina el golpe cívico-militar más sangriento de la historia. Llevó adelante un siniestro plan de tortura y de exterminio a todo aquel que soñara con un país distinto. 30000 compañeros desaparecidos, una deuda económica completamente ilegítima, la destrucción de todo el aparato productivo, miedos, silencios, prácticas sociales que costaron mucho modificar y transformar fueron algunas de las secuelas que dejo esta tragedia que ocurrió en nuestro país.
"Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando a la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina", decía Rodolfo Walsh en su valiente denuncia a la Junta militar.
Banderas celestes y blancas, algunas con las caras de Evita y de Peron , El eternauta, todas indicando sus lugares de pertenencia, también "trapos" verdes y el de los pueblos originarios. Chicos, adolescentes, adultos, abuelos, amigos, todos compartiendo un momento donde las sensaciones eran encontradas. Por un lado: tristeza porque se recordaba una fecha que tiene que ver con un proceso que muy mal le hizo al país y por otro lado una emoción similar a la alegría porque se puede trabajar a la memoria con unas cuantas batallas ganadas en comparación a unos años atrás.
Un breve Julio Alak(ministro de Justicia) dió unas palabras sobre la importancia de recordar el día. Zanini (Secretario de la presidencia), hablo de lo importante que es construir puentes y no muros, Juan Martín Fresneda (Secretario de Derehos Humanos): un tanto disfonico agradeció a los gobiernos de Néstor y Cristina por sus políticas en materia de derechos humanos. Las Madres, Las Abuelas, Hijos, colectivos de artistas, también dieron sus impresiones en e
motivos discursos.
38 años han pasado, y muchas heridas aún no pueden cicatrizar porque queda mucho trabajo por hacer. Juicios y apertura de archivos, nietos que esperan poder recuperar su identidad, abuelas que se quieren rencontrar con ellos, madres que quieren saber que paso con sus hijos, amigos que necesitan una respuesta sobre donde están esas personas con las que compartían militancia, anécdotas y momentos. Sobrevivientes a este terror que necesitan justicia por lo que pasaron...pero también hay familias que ya estando en democracia sufren y son víctimas de la violencia estatal... 38 años pero un "montón de puentes por construir y muros por derribar".
"La política económica de la junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales" como bien afirmaba Rodolfo Walsh sólo unos pocos se han beneficiado y estos pocos aún no han pedido perdón por su silencio y su complicidad...
38 años: ¡¡Nunca más!!
Una tarde que no es una más de un día feriado, sino que tiene un plus distinto. Muto mucho en estos últimos años la manera de recordar: caminatas de pocos en Plaza de Mayo acompañando a las Madres, Abuelas e Hijos, llenos totales y acompañamiento masivo, entregas de predios, actos en varios puntos del país, y en estos últimos tiempos, se ha instalado como paradigma: llenar de vida a un día que tanto se lo relaciona con la muerte.
Hace 38 años comenzaba en la Argentina el golpe cívico-militar más sangriento de la historia. Llevó adelante un siniestro plan de tortura y de exterminio a todo aquel que soñara con un país distinto. 30000 compañeros desaparecidos, una deuda económica completamente ilegítima, la destrucción de todo el aparato productivo, miedos, silencios, prácticas sociales que costaron mucho modificar y transformar fueron algunas de las secuelas que dejo esta tragedia que ocurrió en nuestro país.
"Una política semejante sólo puede imponerse transitoriamente prohibiendo los partidos, interviniendo los sindicatos, amordazando a la prensa e implantando el terror más profundo que ha conocido la sociedad argentina", decía Rodolfo Walsh en su valiente denuncia a la Junta militar.
Banderas celestes y blancas, algunas con las caras de Evita y de Peron , El eternauta, todas indicando sus lugares de pertenencia, también "trapos" verdes y el de los pueblos originarios. Chicos, adolescentes, adultos, abuelos, amigos, todos compartiendo un momento donde las sensaciones eran encontradas. Por un lado: tristeza porque se recordaba una fecha que tiene que ver con un proceso que muy mal le hizo al país y por otro lado una emoción similar a la alegría porque se puede trabajar a la memoria con unas cuantas batallas ganadas en comparación a unos años atrás.
Un breve Julio Alak(ministro de Justicia) dió unas palabras sobre la importancia de recordar el día. Zanini (Secretario de la presidencia), hablo de lo importante que es construir puentes y no muros, Juan Martín Fresneda (Secretario de Derehos Humanos): un tanto disfonico agradeció a los gobiernos de Néstor y Cristina por sus políticas en materia de derechos humanos. Las Madres, Las Abuelas, Hijos, colectivos de artistas, también dieron sus impresiones en e
38 años han pasado, y muchas heridas aún no pueden cicatrizar porque queda mucho trabajo por hacer. Juicios y apertura de archivos, nietos que esperan poder recuperar su identidad, abuelas que se quieren rencontrar con ellos, madres que quieren saber que paso con sus hijos, amigos que necesitan una respuesta sobre donde están esas personas con las que compartían militancia, anécdotas y momentos. Sobrevivientes a este terror que necesitan justicia por lo que pasaron...pero también hay familias que ya estando en democracia sufren y son víctimas de la violencia estatal... 38 años pero un "montón de puentes por construir y muros por derribar".
"La política económica de la junta sólo reconoce como beneficiarios a la vieja oligarquía ganadera, la nueva oligarquía especuladora y un grupo selecto de monopolios internacionales" como bien afirmaba Rodolfo Walsh sólo unos pocos se han beneficiado y estos pocos aún no han pedido perdón por su silencio y su complicidad...
38 años: ¡¡Nunca más!!
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